«Sin duda a quien lea este artículo recomiendo a Antonio Arroyo. Una enfermedad y la casualidad de leer sobre su profesionalidad y asesoramiento nos puso en el camino. Para una persona que por desgracia no conoce este tipo de problemas se hace muy cuesta arriba empezar cualquier trámite, pero desde la comprensión, asesoramiento y empatizar con este profesional se hace todo más fácil.

Lo digo por experiencia propia que llegó a buen puerto, pero si no se hubiese ganado el juicio me hubiera sentido orgulloso igualmente de la persona que me representaba. Él lo sabe y lo digo desde el corazón y conocimiento que lo dio todo. Si retrocediera en el tiempo volvería a contar con sus servicios. Muchas gracias por todo Antonio, sabes que tienes todo el cariño de mi familia y gracias por encender la luz al final del túnel que tantas veces hemos hablado.»